Por
Jorge Bauer*
Buenos Aires / Viena (AT) – Se cumplieron hace una semanas, 100 años del nacimiento de Alfredo Bauer. Sus amigos escritores y académicos, junto a varios de sus descendientes, organizaron un homenaje. Inició la presentación Nerina Visacovsky (Centro documental Pinie Katz – CONICET) como dueña de casa. Hablaron Regula Rohland y Miguel Vedda en presencial y Erich Hackl con un video mensaje desde Europa. Participaron también sus nietos. Nico le rindió homenaje con algunas palabras, entre las que mencionó un párrafo de un testamento (según el título que le puso Alfredo) y Leo cantó varias canciones, algunas de las preferidas de Alfredo. Yo, su hijo Jorge (que no pudo correr 100% a un costado su formación en robótica), armó y presentó un video con su primer escrito (1944), la obra de teatro “Die Antwort = La Respuesta”. Se trata de un escrito sobre un acto de resistencia contra el fascismo – nazismo, presentado originalmente en un momento en que aun la guerra no había terminado. Con un video que recrea con títeres y en esquema de historieta, se buscó mantener el espíritu de ese escrito, con su ironía y su capacidad de lucha en todas las condiciones. De estas maneras, se recordaron algunas facetas de las muchas que indudablemente tenía Alfredo Bauer, conocido fundamentalmente como médico, escritor y militante político.
Entre el pragmatismo y el humor
De muy joven a los 19 años, siguiendo las enseñanzas de sus maestros August Siemsen, Max Tepp se incorporó al “Movimiento Austria libre”, al “Verein Vorwärts” y al partido comunista argentino en cuyo seno permaneció fiel y activo hasta su muerte, pasando los mas diversos periodos. Recuerdo que decía , “los mayores humanistas son los comunistas” y ponía como ejemplo a Pablo Neruda, Jorge Amado o Nazım Hikmet para mencionar solo algunos. Cuando yo le preguntaba: y Stalin y Nicolau Ceaușescu respondió: “esos eran infiltrados” lo cual no se si reflejaba su pragmatismo, su humor irónico o ambos
Como dije en alguna lámina durante el reciente homenaje, también fue germanista, traductor, hijo, esposo, padre, abuelo, amigo y, fundamentalmente, un apasionado humanista. Como surgió de los distintos comentarios de los participantes durante el cierre, fue un humanista muy humano con sus muchas virtudes y también contradicciones, lo cual no minimiza sino engrandece sus logros, en los tiempos históricos difíciles en que le tocó vivir, en los tiempos históricos difíciles que nos toca vivir.
Osvaldo Bayer y Alfredo Bauer: una amistad de la vida
Su querido amigo, el admirado Osvaldo Bayer lo despidió en 2016 con una nota titulada “El Hombre puro coraje”. Hoy, parafraseando a Felipito, el genial “hijo” del querido Quino cuando al pasar por un monumento en la plaza lee “Luchador incansable de ideas claras” y piensa …. “Así cualquiera, lo difícil es estar cansado y seguir luchando”. Sin contradecir a mi querido Osvaldo y parafraseando a Felipito, “Todo coraje = sin miedo”, así es fácil, lo difícil es sentir miedo y seguir luchando, cosa que los que lo conocimos de cerca sabemos que con sus blancos y negros siempre hizo.
Hoy, desde la tierra donde alguien conocido en la Argentina dijo “con democracia se cura, se educa, se come”, yo .junto a la laguna de Chascomus mientras admiro los atardeceres y al dios de Espinoza, lo recuerdo y pienso: “Si no se cura, no se educa, no se come no hay democracia”, hoy somos muchos los que sentimos que la casa “No está en orden”. Hoy como ayer, superando nuestros miedos debemos seguir luchando.
Alfredo, en el mencionado escrito (1944), decía “…… cada pelea que se lleva a cabo sin piedad, en forma abierta o escondida, con violencia o astucia, acciones heroicas y pequeño trabajo diario. Todo es valioso lo que nos acerca al objetivo, pues nuestra acción va por …..la liberación de Austria.! Entonces, hoy diría, según él me enseñó: “por la defensa de nuestra aldea global y una vida humanamente digna en paz para todos sus habitantes”
Como se dice, “Como último y no por ello menos importante”, quiero agradecer al Argentinische Tageblatt, a sus directivos, periodistas y sus lectores de ayer y de hoy, un diario Humanista que Alfredo admiraba y amaba con todas sus contradicciones, en el que publico en infinitas oportunidades sus pensamientos en los más diversos temas.
*Jorge Bauer es hijo de Alfredo Bauer. Jorge es Ingeniero Mecánico, Universidad Tecnológica Nacional, FRBA (1983) y Doctor en Ciencias Técnicas, Universidad Técnica de Viena, Austria (2003).
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