Audi dio un paso decisivo en su desembarco en la Fórmula 1 al confirmar el nombre oficial, la identidad visual y la fecha de presentación de su equipo para la temporada 2026. La marca alemana competirá bajo la denominación Audi Revolut F1 Team, en una alianza que une a uno de los gigantes históricos de la industria automotriz con una de las fintech más influyentes de Europa.
El anuncio no solo consolida la estrategia deportiva de Audi, sino que también pone el foco en el respaldo financiero detrás del proyecto y en la figura de Nik Storonsky, fundador y CEO de Revolut, el empresario de origen ruso que impulsa el acuerdo multimillonario.
El lanzamiento formal del equipo se realizará en Berlín el 20 de enero de 2026, con una presentación inmersiva del monoplaza y de la imagen completa de la escudería. Un día después, el evento se abrirá al público. El objetivo es claro: mostrar desde el primer día una identidad sólida y una ambición sostenida para competir en el nivel más alto del automovilismo.
Audi y Revolut, una alianza que va más allá del patrocinio
La elección del nombre Audi Revolut F1 Team refleja una sociedad estratégica que excede la lógica tradicional del sponsor visible en el auto. Audi y Revolut acordaron una colaboración integral, con impacto en la experiencia de los aficionados, en la operación financiera del equipo y en el ecosistema digital que rodea a la escudería.

Revolut aportará soluciones de pago y gestión a través de Revolut Pay y Revolut Business, herramientas que se integrarán tanto en la tienda online de Audi como en los procesos financieros internos del equipo. El manejo eficiente del presupuesto resulta central en un contexto de tope de gastos estricto, donde cada decisión económica influye de manera directa en el rendimiento deportivo.
El acuerdo también incluye activaciones para fans, acceso a experiencias vinculadas a las carreras y beneficios exclusivos dentro de la aplicación de Revolut. La intención es construir una relación directa con una audiencia internacional, joven y digital, alineada con la visión de ambas marcas.
Desde Audi subrayan que la alianza combina innovación tecnológica, precisión y una mirada contemporánea sobre el vínculo entre deporte y público. La Fórmula 1 aparece como una plataforma ideal para expresar esa identidad, en un campeonato que mezcla ingeniería, espectáculo y proyección global.
El proyecto deportivo y la herencia de Sauber
Audi confirmó la continuidad de las principales figuras del proyecto deportivo. Jonathan Wheatley seguirá como team principal, mientras que la alineación de pilotos estará compuesta por Nico Hülkenberg y Gabriel Bortoleto. Mattia Binotto, con pasado en Ferrari, ocupa el rol de responsable máximo del programa de Audi en la Fórmula 1.

La marca alemana trabaja desde 2022 junto a Sauber para fortalecer la estructura técnica y operativa. Las instalaciones en Alemania, Suiza y el Reino Unido recibieron inversiones orientadas a llegar competitivos desde la primera carrera de 2026, que se disputará en Australia.
El proceso de rebranding busca poner en primer plano la identidad Audi, aunque sin borrar la historia del socio suizo. Sauber Holding AG y Sauber Technologies AG mantendrán su nombre, en reconocimiento al legado de Peter Sauber. Otras áreas, como el Technology Centre de Bicester, pasarán a llamarse Audi Motorsport Technology Centre UK, integrándose de manera directa a la nueva marca.
La presentación en Berlín promete una puesta en escena cuidada, con énfasis en claridad, inteligencia técnica y emoción. Allí se mostrará el diseño definitivo del monoplaza, luego de un anticipo conceptual revelado meses atrás, con una paleta dominada por tonos titanio, negro carbón y rojo Audi.
Nik Storonsky, el magnate detrás del respaldo financiero
Detrás del acuerdo que une a Audi con Revolut aparece la figura de Nik Storonsky. Nacido en Rusia y nacionalizado británico, el fundador de Revolut se convirtió en uno de los empresarios tecnológicos más influyentes de Europa. Su historia personal y su estilo de gestión despiertan comparaciones frecuentes con referentes del sector tecnológico a escala mundial.

Storonsky cerró un ambicioso plan de incentivos que podría elevar su participación en Revolut si la empresa alcanza una valoración de USD 150.000 millones, frente a los USD 45.000 millones actuales. El esquema prevé la entrega escalonada de acciones, con un potencial de hasta el 10% de la compañía fundada en Londres en 2015. El acuerdo se transformó en uno de los más comentados del ecosistema fintech europeo, por su magnitud y por el mensaje que envía al mercado.
La comparación con el plan de incentivos que Elon Musk firmó con Tesla en 2018 surge de manera casi automática. En aquel caso, Musk accedía a paquetes de acciones condicionados al cumplimiento de metas de valuación y desempeño. El proceso derivó en una extensa disputa judicial en Estados Unidos, con idas y vueltas hasta la ratificación del acuerdo por parte de los accionistas.
En Revolut, el esquema también se apoya en objetivos de valoración, aunque con una estructura distinta. La compañía prioriza la compensación variable para alinear intereses entre la conducción y el crecimiento del negocio. La estrategia apunta a retener talento directivo en un escenario altamente competitivo.
En términos financieros, Revolut registró en 2024 beneficios por GBP 1.000 millones, impulsados por productos de trading y ahorro. La retribución total de Storonsky alcanzó GBP 17,8 millones, con un salario base reducido y una fuerte ponderación de acciones. En una operación reciente, el CEO vendió parte de su participación y obtuvo una ganancia cercana a GBP 350 millones, equivalentes a EUR 409 millones.
El respaldo de Revolut al proyecto de Audi en la Fórmula 1 se inscribe en esa lógica de expansión y visibilidad. La escudería funciona como una vidriera de alcance mundial, alineada con la ambición de la fintech de consolidarse como actor dominante en el sistema financiero digital.



Hacé tu comentario