Buenos Aires / Viena (AT) – El partido populista de derechas FPÖ podría ocupar el Ejecutivo de Austria por primera vez en su historia. El lunes, el presidente federal Alexander Van der Bellen encargó al líder del FPÖ , Herbert Kickl, que formara gobierno. Poco antes, el canciller federal Karl Nehammer de la conservadora ÖVP había dimitido tras fracasar las negociaciones para formar de un gobierno de coalición de centro-izquierda. Dentro del ÖVP, se alzan ahora las primeras voces a favor de una alianza de derechas con el FPÖ. El líder en funciones del ÖVP , Christian Stocker, envió señales en este sentido. En Viena, miles de personas se manifestaron contra una posible canciller Kickl.
En Alemania, la noticia generó conmoción en el arco político, ante la posibilidad de que el ejemplo de Viena se repita en Alemania tras las próximas elecciones a celebrarse el 23 de febrero. El portavoz de política exterior del grupo parlamentario del SPD en el Bundestag, Nils Schmid, advirtió al ÖVP contra una coalición con el FPÖ. “Sería una señal fatal que los conservadores de Austria se convirtieran en una plataforma para el FPÖ de extrema derecha en su camino hacia la cancillería”, declaró Schmid en diálogo con el medio Table.Briefings. La posición de Austria en la UE estaría en peligro. “Una toma de posesión del gobierno por el FPÖ significaría que Austria dejaría de ser un socio en cuestiones delicadas de política de seguridad y que Putin tendría una voz más en los procesos de toma de decisiones de la UE”, dijo Schmid.
Señal de alarma para Alemania
Por su parte, la CSU, el socio bávaro del conservador del CDU, considera que el fracaso de la anterior coalición negro-verde en Austria es la causa del éxito electoral del FPÖ y de la crisis. La coalición entre el ÖVP y Los Verdes en Austria fue la ruina del ÖVP, dijo el líder del partido, Markus Söder , en la reunión a puerta cerrada de los diputados de la CSU en el Monasterio de Seeon, según comentaron varios de los participantes en diálogo con los medios. La CSU viene desmarcándose desde hace meses contra la posibilidad de una alianza entre los conservadores (CDU / CSU) y Los Verdes alemanes tras las elecciones federales. El líder del grupo regional de la CSU, Alexander Dobrindt, calificó la perspectiva de un gobierno del FPÖ de “señal de alarma para Alemania”. La dirección de la CSU es partidaria de una alianza con el SPD – “sin Olaf Scholz” (Söder)- tras una posible victoria electoral.
La política del FPÖ respecto a Ucrania se considera especialmente crítica en la CDU/CSU. Quiere poner fin a la ayuda a Ucrania y critica las sanciones contra Rusia por “irresponsables”. Reinhold Lopatka, jefe de la delegación del ÖVP en el Parlamento Europeo, exigió a Kickl que “rediseñara su política antieuropea”. Un acuerdo de coalición debe estipular que “Austria es y seguirá siendo un socio fiable y activo en la Unión Europea (UE)”, afirmó. Sin embargo, un acuerdo de coalición no puede estipular cómo se comportará el jefe de gobierno en las cumbres de la UE.
Scholz: “Nunca entraré en una coalición con la AFD”
Por su parte, el actual canciller Olaf Scholz volvió a descartar cualquier posibilidad de una alianza con la derechista alemana AfD. En declaraciones ante el canal de noticias ntw, Scholz declaró: “Una cosa tengo clara: nunca entraré en una coalición con la AfD”. Scholz es nuevamente el candidato de los socialdemócratas alemanes (SPD) para el puesto de canciller en el remoto caso que el SPD logre una mayoría en las elecciones.
La AfD celebra los resultados de Viena
Mientras, el partido de derechas Alternativa para Alemania (AfD) celebró ayer el mandato recibido por el ultraderechista FPÖ para formar gobierno en Viena. La candidata a canciller de la AfD, Alice Weidel, sostuvo que los acontecimientos en Austria deberían convencer a la conservadora Unión Demócrata Cristian (CDU) de Alemania de que abandone su llamado “cortafuegos” que impide la cooperación con la AfD. “La hora del ‘cortafuegos’ llegará pronto también para nosotros”, declaró Weidel.
El catedrático de Políticas de Frankfurt Thomas Biebricher advierte de que una coalición con el FPÖ podría llevaral ÖVP «a una crisis existencial»a medio plazo . Los votantes del centro político podrían alejarse, y al mismo tiempo el ÖVP podría ganar pocos votos del FPÖ en una coalición. «Los partidos conservadores rara vez salen fortalecidos de coaliciones con populistas de derechas», afirma el autor del libro “Centro/Derecha” sobre la crisis del conservadurismo.
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