Buenos Aires (AT) – El presidente argentino, Javier Milei, habló en el Foro de Davos, donde acusó a los líderes occidentales de abandonar “los valores de Occidente”. Fue un esperado discurso por las características del mandatario, y también su debut en el escenario mundial.
“Hoy estoy acá para decirles que Occidente está en peligro, está en peligro porque aquellos, que supuestamente deben defender los valores de occidente, se encuentran cooptados por una visión del mundo que – inexorablemente – conduce al socialismo, en consecuencia a la pobreza.”, dijo Milei.
Afirmó que las “organizaciones internacionales” habían sido influenciadas por el “colectivismo”, el “feminismo radical” y la “agenda medioambiental”.
Segú el Financial Times, el líder de una importante firma europea salió “impresionado” del salón del congreso después del discurso de Milei. Antes del discurso, Daniel Pinto, presidente y director de operaciones de JPMorgan, dijo que el nuevo gobierno de Argentina “podría estar creando un nuevo comienzo para el país, poniendo fin a 80 años de deterioro económico”.
La aparición de Milei en Davos, su primer viaje al extranjero como presidente, fue oportunidad de presentar su visión ultraliberal a la élite global después de su victoria electoral.
La comitiva del presidente y el viaje en general fue más bien austero. Lo acompañaron su hermana Karina Milei; el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y el ministro de Economía, Luis Caputo. Milei, además, viajó en un vuelo comercial, lo que provocó la sorpresa de los viajeros y la consecuente serie de pedidos de selfies. El regreso a Buenos Aires está previsto para el viernes a las 7.55. También participó el embajador de Argentina en Estados Unidos, Gerardo Werthein, hombre vinculado al mundo de los negocios y del deporte.
Más allá de sus particularidades, Milei no es el primer presidente que genera revuelo con su visita al Foro de Davos. ¿Cómo fueron los discursos y las comitivas de otros mandatarios nacionales?
La participación argentina en el Foro de Davos
Carlos Menem: vientos de cambio económico (1991, 1997)
En 1991, el presidente Carlos Menem hizo su primera aparición en Davos. Allí, resaltó las transformaciones económicas que había implementado en Argentina. Su discurso se centró en la apertura del país a la inversión extranjera y la privatización de empresas estatales, medidas que buscaban estimular el crecimiento económico. En ese entonces, Menem viajó en el avión presidencial Tango-01, y lo acompañaron su hija, Zulema; los secretarios General de la Presidencia, Alberto Kohan, y de Prensa y Difusión, Raúl Delgado, y el gobernador de Santa Fe, Jorge Obeid.
Un detalle curioso: el jefe del Estado llevó una bolsa con palos de golf para sus actividades deportivas en Suiza.
Seis años después, en 1997, Menem volvió al escenario de Davos, donde se enfocó en los logros económicos de su gobierno, incluyendo la estabilidad macroeconómica y la modernización de la infraestructura.
Fernando de la Rúa: tiempos de crisis (1999)
En 1999, el entonces presidente Fernando de la Rúa se enfrentaba a una compleja crisis económica. En su participación en Davos, delineó las medidas necesarias para atraer inversiones extranjeras y superar los desafíos económicos. Además, intentó destacar la importancia de la estabilidad financiera y la consolidación fiscal.
Al igual que Milei, De la Rúa viajó en avión de línea y Davos fue su primera gira por el exterior como mandatario. La visita fue por entonces percibida por los medios de comunicación argentinos como exitosa. Según el diario La Nación, “el nuevo presidente argentino despertó una expectativa muy importante entre los principales hombres de empresa”. El presidente radical fue destacado por sus reuniones con Bill Clinton y Tony Blair, presidentes de Estados Unidos y Gran Bretaña.
Néstor Kirchner: el comienzo de una ausencia
Con la llegada de Néstor Kirchner al poder se inauguró un cambio rotundo en la economía y la política de Argentina. Ni el presidente peronista ni luego Cristina Fernández asistieron a Davos. La resistencia a viajar a Suiza coincidió con el apoyo que ambos quisieron darle entonces al Foro Social, el encuentro alternativo promovido por el entonces presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva. Sin embargo, el propio Lula participaba activamente en Davos, que en una de sus ediciones llegó a incluir un debate por teleconferencia entre Klaus Schwab, presidente del Foro de Davos, y los organizadores del Foro Social.
Mauricio Macri: la apertura a los negocios (2016)
Tras una ausencia de 12 años, el presidente Mauricio Macri participó en Davos con el objetivo de, según dijo entonces, “atraer inversiones para Argentina”. Pero lo más llamativo fue que Macri viajó acompañado por uno de los líderes de la oposición, el entonces diputado Sergio Massa, quien el año pasado perdió las elecciones frente a Milei.
El jefe de gabinete de Macri, Marcos Peña, dijo antes de viajar a Suiza: “nos pareció un gesto importante poder ir juntos con un dirigente opositor que está trabajando de una manera responsable, planteando su agenda de disidencias, pero también consciente de los desafíos que tenemos como país”.
Por esos años, Massa era percibido como un peronista disidente por sus fuertes críticas a Cristina Fernández. Resulta curioso, al menos para el lector desprevenido, que años después terminaran gobernando juntos para enfrentar a Macri. Pero entonces, en el 2016, Massa expresó su compromiso en colaborar con Macri para atraer inversiones y generar empleo para Argentina. “Yo no voy a acompañar al presidente representando a mi partido: voy a acompañar al presidente para tratar de que los dos, con la camiseta argentina, podamos conseguir inversiones para generar trabajo para la Argentina”, afirmó Massa.
Alberto Fernández: un discurso marcado por la pandemia (2021)
El reciente ex presidente Alberto Fernández no visitó Davos, pero sí participó. Su discurso fue realizado de manera virtual debido a la pandemia del coronavirus. En ese contexto, propuso “impulsar una agenda de temas de vanguardia, propios del siglo XXI”, instando a las naciones a “dejar atrás el capitalismo infeliz”.
Además, criticó a las sociedades que “descartan a los más débiles”, señalando que la pandemia de coronavirus no es simplemente un accidente histórico, sino un “llamado de atención para edificar una casa común con otros cimientos”. También advirtió que en Argentina “no hay lugar para más ajustes”.
Como se puede percibir sin demasiado esfuerzo, los discursos de los presidentes argentinos y sus participaciones reflejan en parte las contradicciones de un país que avanza y retrocede de forma constante.
Interesante contenido, felicitaciones