Buenos Aires (AT) – La frase “Nadie es profeta en su tierra” bien se puede aplicar a la historia de Macarena Ceballos (28), nacida en Río Cuarto, provincia de Córdoba, quien a sus 20 años tomó la decisión de continuar su carrera de nadadora en la Sociedad Alemana de Gimnasia de Villa Ballester (SAGVB). El crecimiento, sus participaciones en torneos internacionales y la clasificación para los Juegos Olímpicos de 2024 le acaban de confirmar que tomar el destino en nuestra propias manos es clave.
En su Río Cuarto natal, Macarena, de pequeña, practicaba gimnasia artística. Pero el apego a una de sus hermanas la animó a probar con la natación. Los buenos resultados no tardaron en llegar y con ellos los títulos: medallas en los Sudamericanos Juveniles de Valparaíso 2013 y en los Juegos ODESUR de Santiago 2014. El mejor incentivo para que su pasión por la natación se potenciara.
Un año bisagra
Llega el año 2015, Ceballos debuta en los Juegos Panamericanos de Toronto. En el mismo año, llega su primer récord argentino, en 50 metros estilo pecho, en el Campeonato Nacional de Brasil. “Tenía 20 años cuando entendí que mi carrera había llegado a un techo y que si quería avanzar como nadadora tenía que irme de Río Cuarto donde las condiciones para entrenar no eran las mejores”, relata Ceballos en diálogo con el Argentinisches Tageblatt.
Macarena decide seguir su sueño y se muda a Buenos Aires. Fue una decisión familiar muy difícil, su madre había fallecido en 2007 en un incendio y ella sentía que dejaba a su padre sólo con sus hermanas, admite. Su familia, consciente de la necesidad de Macarena de abandonar Córdoba para seguir su sueño olímpico, la apoya sin embargo de manera incondicional.
Más que un equipo, una familia
Ceballos recuerda que los primeros tiempos en Buenos Aires no fueron fáciles: “Al comienzo, todo era bastante diferente para mí, porque en Córdoba éramos pocos nadadores y todos de diferentes edades. En SAGVB encontré un equipo, y hoy siento que somos como una familia, compartimos todo”. La nadadora reconoce que, antes de llegar de la SAGVB, “sólo sabía que era un club muy grande pero hoy estoy segura que es el club más importante de la Argentina en cuanto a natación”.
Tras su aterrizaje en el SAGVB, Macarena comienza a dejar huella: tan sólo 18 milésimas la dejan afuera de los Juego Olímpicos de Río 2016. Y luego de no poder estar presente en Tokio 2020 (Nota d. l. Red.: la pandemia de COVID-19 obligó a postergar un año la celebración de los JJ.OO.) llegaría un gran 2023 y “su” mundial.
“Maca” hace escala en Japón para llegar a París 2024
En julio de 2023, Ceballos lleva su sueño olímpico al Mundial de Natación en Fukuoka, Japón. Allí marca un tiempo de 1:06.69 en las eliminatorias de 100 metros estilo pecho y establece un nuevo récord sudamericano. Pero, más importante aún: la marca la clasifica para los Juegos Olímpicos de París 2024. Un sueño hecho realidad.
Al evaluar su participación en el Mundial, Ceballos afirma: “Por los resultados obtenidos fue, claramente, mi mejor Mundial. Creía que la clasificación la iba a conseguir en los Panamericanos de Santiago de Chile, ahora en octubre, pero sucedió en Japón”.
“Macarena Ceballos es la primera deportista de SAGVB ya clasificada para los próximos Juegos Olímpicos. Actualmente muchos deportistas destacados en Sudamérica entrenan en nuestro club y confiamos que también van a estar allí junto con Maca”, comenta Luis Propato, presidente de SAGVB, al Argentinisches Tageblatt.
¿París, y después?
Al consultarla por sus expectativas para París 2024. Macarena confiesa que, a pesar de encontrarse en la plenitud de su carrera, el día después siempre la acompaña. “El sueño era clasificar, entrenar con todas las energías para poder disfrutar de la experiencia olímpica y así dar por cerrado un ciclo soñado. Pero la verdad es que con mis 28 años me siento muy bien físicamente, estoy en un nivel muy competitivo así que luego de los Juegos ODESUR de Rosario en 2026 veré que hago. Quiero formar una familia y terminar mi carrera de periodista”, resume su próximo sueño a cumplir.
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