Buenos Aires (AT) – El periodismo tiene futuro, pero no la tiene fácil. En un mundo donde las noticias viajan a la velocidad de un clic y los titulares compiten por likes, el oficio del periodista se enfrenta hoy más que nunca a desafíos globales. Las redes sociales como TikTok, X e Instagram cambiaron la forma en que consumimos noticias, especialmente entre los jóvenes, mientras los canales de streaming y podcasts ganan terreno. A esto se suman avances como la inteligencia artificial, que está revolucionando muchas profesiones, incluida la del periodista. Pero el mayor reto quizás no sea técnico, sino más ético, es decir luchar contra la desinformación: fake news, teorías conspirativas y datos falsos que circulan sin control en internet. ¿Qué implica esto para los medios y los periodistas? Un mundo en transformación, pero con muchas historias por contar.
“Entonces, ¿qué es ser periodista hoy?” preguntó Carolina Amoroso, periodista argentina y moderadora del debate “El rol del periodista en el futuro” en el marco del Foro Futuro organizado por la Embajada de Alemania en Buenos Aires que se realizó el miércoles pasado. La pregunta que parece ser el gran interrogante del momento. “El periodismo sigue siendo el de siempre; lo que cambió son los canales y la forma en que inyectamos periodismo en esos nuevos espacios. No sabemos dónde estaremos dentro de 20 años, pero lo que es claro es que el periodismo mantiene su rol esencial: validar información, generar contrapesos al poder y fortalecer el funcionamiento de cualquier sociedad democrática”, explica Paula Moreno Román, presidenta de FOPEA (Foro de Periodismo Argentino).
Iván Schargrodsky, director y fundador del medio digital Cenital a sus 35 años, tiene una visión distinta. “Creo que un periodista hoy es lo que la audiencia cree que es un periodista”, afirma. Sin embargo, señala un fenómeno preocupante: “En Argentina y en el mundo, la opinión de una cuenta falsa en Twitter, vinculada a un partido político, tiene para muchos la misma validez que lo que puedo decir yo. Y eso es infelizmente una realidad“.
“Entonces nosotros lo que podemos hacer es lamentarnos sobre eso o asumir que hoy el empresario tecnológico más importante del mundo dijo, nosotros somos los medios ahora”, alude Schargrodsky a lo dicho por el empresario estadounidense Elon Musk. “Lo que está haciendo Musk es anticipar algo que ya ocurre y que va a seguir ocurriendo.”
En la misma línea, Paula Moreno Román hizo una observación clave: el verdadero poder en los medios está en manos de quienes los controlan. ¿Quién marca la agenda en los medios tradicionales? ¿Y qué significa realmente tener un medio de comunicación? Mientras Elon Musk juega a su propio juego en su propio campo, hay otras figuras que mueven las piezas en los medios tradicionales. Y en medio de todo este tablero, la gran pregunta sigue siendo: ¿cómo seguimos sosteniendo el periodismo? ¿Cómo avanzamos?
“Como país democrático, Alemania tiene un gran interés en mantener un periodismo fuerte e independiente, ya que es una base fundamental de nuestra democracia. Nuestros ciudadanos tienen derecho a recibir información equilibrada y contextualizada para formarse sus propias opiniones. Solo así nuestras democracias pueden funcionar”, abrió Dieter Lamle el embajador alemán el debate frente a un público repleto de periodistas argentinos, empresarios y corresponsales de medios alemanes.
Moreno Román agrega: “Hoy en día es muy difícil hacer periodismo de calidad”. Iván Schargrodsky, desde su experiencia con Cenital, un medio nuevo enfocado en periodismo de calidad e investigación que además cuenta con un streaming propio, responde con claridad: “Sé perfectamente qué debería hacer para que en lugar de 100.000 personas me vean 500.000 por programa, pero me daría vergüenza venir acá a hablar con ustedes si yo hiciera algo de esa naturaleza”.
“Creo que el periodismo se está encaminando hacia un nuevo modelo de negocios, algo que definitivamente debe incorporar. Sin embargo los medios en particular y el periodismo en su conjunto, están y estamos un poco, perdónenme el término, pero al cachetazo, vamos acomodándonos”, así Moreno Román.
Carolina Amorosa, moderadora del debate, subrayó el deterioro de la figura del periodista en Argentina, una figura cada vez más despreciada, no solo por los políticos, sino también por la sociedad, que ha perdido credibilidad en los medios. Christoph Gurk, periodista alemán y corresponsal del diario alemán Süddeutsche Zeitung, señaló que también en su país se observa un proceso de desvalorización del periodismo, aunque no tan marcado como en Latinoamérica. “Hace 20 o 30 años, la imagen pública del periodista era mucho más fuerte; hoy en día, es menos relevante”. Además, Gurk se asombró por el impacto que tuvieron los servicios de streaming en Argentina, algo que, según él, aún no alcanzó el mismo nivel en Alemania. “Alemania debería mirar más hacia países como Argentina, para ver lo que está sucediendo y un poco lo que se les da quizás por venir”.
Ante la incertidumbre sobre el futuro de la inteligencia artificial, Paula Moreno Román sostiene que la respuesta debe ser un periodismo de mayor calidad. Esta perspectiva es compartida tanto por el periodista alemán Gurk como por Schargrodsky. En lugar de temer a la inteligencia artificial, proponen centrarse en la acción, poniendo énfasis en el periodismo riguroso y en el fact-checking como elementos esenciales para mantener la credibilidad y el valor del periodismo en la era digital.
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