Buenos Aires / Berlin / Washingtron – Elon Musk se metió de lleno en la campaña electoral en Alemania con sus críticas a la gestión socialdemócrata en Berlín. Sin embargo, sus comentarios publicados en una columna de opinión en el semanario Welt am Sonntag parecen haber cruzado un límite, según Rolf Mützenich, del Partido Socialdemócrata Alemán (SPD). El jefe del grupo parlamentario socialdemócrata exigió en declaraciones a la revista Der Spiegel que se aclare “si las repetidas faltas de respeto, difamaciones e injerencias en la campaña electoral se hicieron también en nombre del nuevo gobierno estadounidense”. Mützenich acusó a Musk de traspasar “un límite entre países amigos”. El multimillonario estadounidense se había manifestado particularmente contra el presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, y el canciller Olaf Scholz.
Musk había escrito en inglés en la plataforma de internet X, de la que es propietario: “¡Steinmeier es un tirano antidemocrático! Qué vergüenza”. Steinmeier había exigido anteriormente que no se ejerza influencia exterior en la política interna alemana. Los comentarios de Musk no eran los primeros dardos virtuales en dirección a Berlín: el empresario había llamado también “bufón” a Scholz en X y exigió su dimisión. La respuesta desde cancillería no se hizo esperar: en su discurso de Año Nuevo al electorado, Scholz subrayó: “Ustedes -los ciudadanos- deciden lo que pasa en Alemania. No depende de los propietarios de las redes sociales”.
Por su parte, el copresidente del SPD, Lars Klingbeil, ya había comparado a Musk con el presidente ruso, Vladímir Putin, por interferir en la campaña de las elecciones parlamentarias alemanas, que se celebrarán el 23 de febrero.
Musk y la AfD
Musk, propietario de la marca de automóviles eléctricos Tesla, pidió repetidamente el voto para la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) y escribió en un artículo para el domincal germano Welt am Sonntag que ese partido es “la última chispa de esperanza para el país”.
Musk está considerado un estrecho asesor del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, que le ha encargado que trabaje con el empresario Vivek Ramaswamy en un comité de nueva creación llamado DOGE (“Departamento de Eficiencia Gubernamental”) para elaborar propuestas de recorte del gasto público. Sin embargo, no será miembro oficial del Gobierno.
Musk es conocido por sus numerosas compañías, entre ellas Tesla, SpaceX, Neuralink y X.AI, pero también como un usuario extremo de su propia plataforma X (antes Twitter), que adquirió en 2022, donde tiene 210 millones de seguidores. Su último nombre de usuario en X es “Kekius Maximus“.
(AT / dpa)
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