El partido correspondiente a la primera jornada de la Copa de Alemania entre el FC Schalke 04 y el club Lokomotive Leipzig, fue epicentro de un nuevo hecho de racismo en el fútbol. La víctima: Christopher Antwi-Adjei. Comenzó con un insulto solitario de un hincha, el que fue inmediatamente denunciado por el jugador del Schalke ante el árbitro del encuentro. Pero el acoso siguió casi todo el encuentro, por lo que el hecho cobró una fuerte relevancia.
El futbolista, de ascendencia ghanesa y nacido en Hagen, advirtió a los 15 minutos del primer tiempo sobre el insulto inicial. El árbitro Max Burda interrumpió brevemente el encuentro, que en ese momento estaba 0 a 0, para que en el estadio se emitiera un mensaje condenando cualquier forma de discriminación. A pesar de ello, los abucheos contra Antwi-Adjei continuaron durante todo el partido cada vez que tocaba la pelota.
“Eso no va, no hoy en día, no va nunca. Se escuchó ‘Scheiß-Nigger’(“Negro de mierda”)”, declaró el jugador después del triunfo por 1 a 0 en tiempo suplementario. Y agregó: “No fue todo el estadio, fue uno solo. Espero que esa persona repiense lo que dijo”.
La policía alemana inició una investigación penal luego de que el propio Antwi-Adjei realizara la denuncia formal. El club Schalke confirmó la presentación a través de un comunicado oficial.
Racismo en el fútbol de Alemania: la FIFA exige sanciones
La reacción internacional no tardó en llegar. El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, condenó en duros términos el episodio. “Me repito, y lo seguiré haciendo: en el fútbol no hay lugar para el racismo ni para ninguna otra forma de discriminación”, afirmó el máximo dirigente del fútbol mundial.
Infantino exigió al fútbol alemán y a las autoridades estatales una rápida y contundente respuesta. “La FIFA, el gremio de jugadores y toda la comunidad futbolística apoyan a quienes son víctimas de estos hechos. Es imperativo que los jugadores sean respetados y protegidos”, subrayó.
Las versiones enfrentadas
Desde Lok Leipzig, el club local, se emitió un comunicado horas después del partido. “No estamos en absoluto orgullosos de la expresión racista que Christopher Antwi-Adjei sufrió en el minuto 15 por parte de un espectador. Por supuesto, pedimos disculpas en nombre de todo el club”, señalaron desde la institución. También recordaron que ya se habían disculpado personalmente con el jugador en los vestuarios.
Sin embargo, el director técnico del Schalke, Miron Muslic, puso en duda que se tratara de un hecho aislado. “Siempre se dice que fue uno solo. Pero yo creo que todo el estadio entendió por qué se paró el partido, y todo el estadio silbó después. No fue un solo idiota”, expresó el entrenador austríaco de origen bosnio en conferencia de prensa.
La DFB también investiga
El Comité de Control de la Federación Alemana de Fútbol (DFB) abrió una investigación formal por el caso y solicitó informes a ambos clubes. El vocero del DFB explicó que también se está evaluando un incidente similar ocurrido en otro partido de Copa, entre el 1. FC Kaiserslautern y Eintracht Stahnsdorf.
Kenan Karaman, capitán del Schalke, confirmó que el plantel estaba dispuesto a abandonar el campo si los ataques continuaban. “Se lo dije al árbitro: no seguimos si esto no para”, relató. Finalmente, el juego continuó tras la advertencia del estadio.
Entre la prudencia y la negación
Hermann Winkler, presidente de la Federación del Nordeste Alemán (NOFV) y vicepresidente del DFB, pidió no sacar conclusiones anticipadas. “Hay que esperar los informes policiales y del árbitro. Basta de especulaciones y acusaciones hasta que no tengamos datos concretos”, declaró a la agencia DPA. Winkler estuvo presente en el estadio y aseguró no haber percibido un ambiente xenófobo.
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