Buenos Aires (AT) – La empresa siderúrgica austriaca Voestalpine ha anunciado la reestructuración de sus operaciones en Alemania, específicamente en el sector de componentes automotrices, afectado por la crisis económica y la caída en la demanda. Entre las medidas más destacadas se encuentra el cierre planificado de su planta en Birkenfeld, que afectará a aproximadamente 220 empleados.
Este cierre está sujeto a los resultados de las negociaciones con el consejo de empresa y la poderosa unión IG Metall. Al mismo tiempo, se llevarán a cabo recortes de personal significativos en la planta de Dettingen, donde se espera reducir la plantilla en un tercio de sus 650 trabajadores actuales.
Peter Felsbach, portavoz de Voestalpine, declaró que estas medidas son necesarias para asegurar la viabilidad a largo plazo del área de suministro de componentes automotrices en Alemania, preservando alrededor de 2.000 puestos de trabajo en total. “El objetivo es la seguridad a largo plazo de nuestra división de conformado de metales, que suministra al sector automotriz”, enfatizó Felsbach. La empresa aclaró también que estas reestructuraciones no afectarán a las operaciones en Austria, aunque podrían implementarse ajustes menores en algunos sectores.
Impacto de la crisis del sector automotriz en Alemania
El sector automotriz alemán, tradicionalmente uno de los pilares de la economía del país, ha visto una significativa disminución en su rendimiento en los últimos años. Esta desaceleración ha afectado directamente a proveedores como Voestalpine, quienes han registrado pérdidas continuas en instalaciones como la de Birkenfeld. Además, este escenario se ha agravado con una nueva advertencia de reducción de ganancias por parte del grupo para el año fiscal 2024/25.
Voestalpine redujo su proyección de ganancias para el período actual, estimando ahora un EBITDA (esto es ganancias antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones) de aproximadamente EUR 1.400 millones (US$ 1.520 millones), significativamente por debajo de los EUR 1.700 millones (US$ 1.846 millones) previstos en agosto. La compañía atribuye esta caída tanto al débil desempeño del sector automotriz como a la depreciación de su filial Buderus Edelstahl en Wetzlar, Alemania.
Reorganización y recortes en Alemania
La reorganización en Alemania incluye no solo el cierre de la planta de Birkenfeld, sino también una serie de medidas destinadas a reducir costos y mejorar la eficiencia. En la planta de Dettingen, por ejemplo, se llevará a cabo una importante reducción de personal, que afectará a un tercio de los trabajadores. Estas decisiones son parte de una estrategia más amplia de la compañía para enfrentar las condiciones difíciles del mercado europeo.
En cuanto a la situación de la planta de Buderus Edelstahl, Voestalpine anunció una nueva depreciación de EUR 50 millones (US$ 54,3 millones) debido a los resultados de las negociaciones en curso para su venta. Este proceso de reestructuración forma parte de un esfuerzo mayor por reposicionar la división de metales de alto rendimiento (High Performance Metals Division), enfocándose en productos más avanzados tecnológicamente, y alejándose de la producción de aceros de herramientas y aceros especiales de calidades estándar.
Perspectivas financieras para Voestalpine
Los últimos datos financieros han mostrado que Voestalpine ha tenido que ajustar sus expectativas a la baja. Para el segundo trimestre del año fiscal 2024/25, la empresa espera un EBITDA de EUR 300 millones (US$ 325,8 millones) y un EBIT (ganancias antes de intereses e impuestos) de EUR 110 millones (US$ 119,5 millones). Para el primer semestre, se anticipa un EBITDA de EUR 720 millones (US$ 782 millones) y un EBIT de EUR 340 millones (US$ 370 millones), cifras que están por debajo de las expectativas del mercado.
Esta reducción de las expectativas de ganancias ha generado incertidumbre en los inversores, lo que provocó una caída del 6% en el valor de las acciones de Voestalpine tras el anuncio. El grupo planea publicar sus cifras finales de resultados el 13 de noviembre de 2024, momento en el que se podrá evaluar con mayor claridad el impacto de estas medidas.
Respuestas de los sindicatos y trabajadores
En respuesta a los anuncios de Voestalpine, los sindicatos, particularmente IG Metall, han iniciado negociaciones intensas para acordar un plan social que minimice el impacto sobre los trabajadores afectados. Actualmente, se están llevando a cabo asambleas informativas con el personal en las diferentes plantas, y se espera que en las próximas semanas se alcancen acuerdos sobre los paquetes de compensación y las ayudas a los empleados que perderán sus puestos de trabajo.
Un representante de IG Metall, que prefirió mantener su nombre en reserva, comentó: “Entendemos la difícil situación del sector, pero debemos garantizar que los trabajadores reciban un trato justo y que se busquen alternativas antes de implementar despidos masivos”. Estas negociaciones serán clave para definir cómo se llevará a cabo el cierre y las reducciones de personal.
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