Buenos Aires (AT) – La industria aérea se encuentra en un periodo de intensa competencia y fluctuaciones económicas, y Lufthansa, una de las aerolíneas más grandes de Europa, no es la excepción. La compañía está lidiando con varios desafíos, incluyendo una dura competencia, la caída de los precios de los billetes y la disminución de los beneficios.
La presión sobre los precios es una consecuencia directa del aumento de la oferta en la industria aérea mundial, un fenómeno que Lufthansa explicó el miércoles en su más reciente informe financiero recogido por el sitio económico y financiero alemán WirtschaftWoche.com.
Competencia y precios en el mercado aéreo
Carsten Spohr, el CEO de Lufthansa, señaló que la industria está viendo una normalización de los precios, que habían subido más de un 20% durante el auge de los viajes tras la crisis del coronavirus. Este aumento en los precios se debió en gran parte a la alta demanda de viajes después de las restricciones por la pandemia, pero ahora, con la oferta expandiéndose, los precios están cayendo nuevamente.
Además de la normalización de los precios, Lufthansa anticipa un ligero descenso en los ingresos unitarios, que es un indicador clave de los precios de los billetes. Este descenso se espera en el trimestre actual, que suele ser estacionalmente fuerte para la industria, acompañado de un aumento en los costos operativos. Estos factores están causando problemas particularmente graves para la marca principal de Lufthansa.
Desempeño financiero y operativo
Después de un débil primer semestre del año, Lufthansa también espera una disminución del beneficio operativo en el tercer trimestre. La principal marca de Lufthansa está sufriendo más que las otras aerolíneas del grupo, que incluyen a Swiss y Austrian Airlines. La competencia en Asia es especialmente intensa, y la reticencia de los viajeros de negocios a volar está afectando los ingresos.
Además, las huelgas del personal de cabina y de tierra en el primer semestre del año costaron a la compañía casi 500 millones de euros. La falta de nuevos aviones, debida a los problemas de entrega de Airbus y Boeing, está generando ineficiencias operativas. Sin embargo, según Spohr, también existen problemas estructurales que necesitan ser abordados. “Por eso queremos acelerar la modernización general de Lufthansa Airlines con un programa de reconversión para convertirla de nuevo en el buque insignia del Grupo”, declaró Spohr.
Problemas de fiabilidad y servicio
Los clientes de Lufthansa se quejan cada vez más de la falta de fiabilidad en las operaciones y del mal servicio. Para contrarrestar esta situación, la aerolínea ha implementado un programa de ahorro y está buscando mejorar sus productos y servicios para lograr un cambio de rumbo. Una de las estrategias clave de la compañía es reducir su programa de vuelos de invierno, priorizando la calidad sobre el crecimiento. Esto debería ayudar a estabilizar los precios de los billetes y mejorar la percepción de la marca entre los consumidores.
Por eso queremos acelerar la modernización general de Lufthansa Airlines con un programa de reconversión para convertirla de nuevo en el buque insignia del Grupo”
Carsten Spohr, CEO de Lufthansa
Impacto en los beneficios del grupo
Como Lufthansa había anunciado previamente a mediados de julio, el beneficio operativo ajustado del segundo trimestre cayó más de un tercio, alcanzando los EUR 686 millones (US$ 749 millones). Esta disminución se atribuye principalmente al débil desempeño de su principal marca. El beneficio neto también se redujo casi a la mitad, situándose en EUR 469 millones (US$ 512 millones). A pesar de estos desafíos, los ingresos del grupo superaron los diez mil millones de euros por primera vez en un segundo trimestre, y el número de pasajeros aumentó un 8%, alcanzando los EUR 36 millones (US$ 39,3 millones).
A mediados de julio, el grupo MDax ya había anticipado una fuerte caída en el beneficio operativo para todo el año, estimando que se situaría entre EUR 1.400 millones y EUR 1.800 millones (entre US$ 1528 millones y US$ 1965 millones), frente a los EUR 2.700 millones (US$ 2.947 millones) del año anterior. Otras compañías aéreas tampoco están en mejor situación: recientemente, Air France-KLM y Ryanair, la mayor aerolínea de bajo costo de Europa, también obtuvieron resultados peores de lo esperado.
Perspectivas futuras
Las acciones de Lufthansa han caído un 25% en los últimos seis meses, reflejando las dificultades que enfrenta la compañía. Sin embargo, la aerolínea está adoptando medidas para adaptarse a las condiciones cambiantes del mercado y mejorar su posición competitiva. La modernización de la flota, la mejora del servicio al cliente y la optimización de operaciones son pasos críticos que Lufthansa está tomando para superar estos desafíos y asegurar su futuro en la industria aérea global.
Lufthansa se encuentra en un periodo de transición y ajuste, y su capacidad para navegar estos desafíos será crucial para su éxito a largo plazo. La compañía está comprometida a mantener su posición como una de las principales aerolíneas del mundo, ofreciendo servicios de alta calidad y adaptándose a las necesidades cambiantes de sus clientes y del mercado global.
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