Buenos Aires (AT) – La competencia entre los gigantes de la aviación Airbus y Boeing no es una simple rivalidad comercial, sino una pugna que ha transformado profundamente la industria aeronáutica en las últimas décadas. Airbus, el fabricante europeo, ha logrado posicionarse con ventaja sobre Boeing, el tradicional líder estadounidense, gracias a una serie de factores que van desde la confianza de los clientes hasta la gestión de sus cadenas de suministro.
Esta competencia, marcada por ganancias récord de Airbus y pérdidas significativas de Boeing, refleja las dinámicas cambiantes de la aviación comercial y los retos que enfrentan ambas compañías en el ámbito de la seguridad, la defensa y el mercado bursátil.
Crisis de confianza en Boeing y el ascenso de Airbus
Uno de los pilares que ha favorecido el ascenso de Airbus sobre Boeing es el respaldo de los clientes. Desde 2019, Boeing ha perdido la confianza de varios clientes a raíz de los accidentes fatales de sus modelos 737 Max, que dejaron un saldo de cerca de 350 víctimas. Esta serie de incidentes generó una larga suspensión de estos aviones en los Estados Unidos y otros países, lo que afectó significativamente la producción de Boeing.
Según datos de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (National Transportation Safety Board – NTSB), en la última década Boeing ha registrado un total de 982 incidentes, en comparación con los 264 de Airbus. Esta disparidad estadística ha sido uno de los factores que ha mantenido a la empresa estadounidense bajo constante escrutinio por la opinión pública y las autoridades reguladoras.
A diferencia de Boeing, Airbus ha continuado ganando terreno en el sector de los aviones de un solo pasillo, especialmente con su modelo A321 XLR, que permitirá a las aerolíneas cubrir distancias más largas de manera eficiente. Este modelo ha captado el interés de varias aerolíneas, incluyendo a Iberia y Riyadh Air, quienes han optado por el A321neo, alejándose del 737 Max de Boeing.
La carrera por la entrega de aviones y el reto de las cadenas de suministro
A medida que la demanda de aviones comerciales se ha incrementado, ambas compañías enfrentan el desafío de cumplir con sus pedidos en un contexto de restricciones en la cadena de suministro. Airbus ha demostrado una capacidad superior para gestionar estos problemas, entregando un total de 497 aviones en lo que va del año, frente a los 291 de Boeing. Nicolas Owens, analista de Morningstar, destacó que el principal desafío para Airbus es incrementar la producción de sus modelos más demandados a niveles superiores a los previos a la pandemia. “Airbus debe aumentar su producción más allá de las tasas pre-pandemia para responder a la demanda actual”, señaló Owens.
Sin embargo, Airbus también enfrenta problemas de abastecimiento, particularmente en el suministro de motores para sus modelos A320 neo, un asunto que los analistas de Bank of America califican de “preocupante” pero manejable. Boeing, en cambio, ha visto restringida la producción de su 737 Max debido a las regulaciones que requieren una supervisión exhaustiva de sus procesos de manufactura, lo cual ha retrasado aún más sus entregas.
Defensa y espacio: un sector en dificultades para ambos gigantes
Aunque la aviación comercial representa el núcleo del negocio de Airbus y Boeing, ambos tienen divisiones de defensa y espacio que han experimentado pérdidas significativas. La división de Boeing reportó un déficit de U$S 2,3 mil millones en el último trimestre, en gran parte debido a pérdidas en programas militares. Además, el proyecto Starliner, desarrollado por Boeing, acumuló un costo de US$ 250 millones debido a problemas técnicos. Boeing no solo se enfrenta a la competencia de Airbus en esta área, sino también a la amenaza creciente de SpaceX, la empresa de Elon Musk, que ha captado gran parte de los contratos de lanzamiento en la industria espacial.
Airbus, aunque en mejor situación, también ha experimentado dificultades en su división de defensa, con una pérdida de EUR 989 millones (US$ 1.078 millones) en el segundo trimestre y el anuncio de hasta 2.500 despidos. Guillaume Faury, CEO de Airbus, reconoció que la industria espacial europea “debe transformarse para competir globalmente frente a nuevos actores”, en referencia indirecta a SpaceX.
La volatilidad de Boeing en el mercado bursátil
En el ámbito financiero, Boeing enfrenta un momento difícil, con sus acciones cayendo un 40% en lo que va del año. Su valor actual en el mercado es de aproximadamente US$ 95 mil millones, mientras que Airbus mantiene una valorización de alrededor de US$ 123 mil millones. Esta caída bursátil es consecuencia tanto de las crisis de seguridad como de la gestión financiera de la empresa. Boeing destinó alrededor de US$ 44 mil millones en recompra de acciones entre 2013 y 2019, priorizando a los inversores sobre las inversiones en calidad y seguridad, un enfoque que varios analistas consideran fue contraproducente.
En contraste, Airbus ha adoptado una estrategia más conservadora en sus finanzas, lo que le ha permitido recuperarse con mayor rapidez tras el impacto de la pandemia y registrar un máximo histórico en el precio de sus acciones. Para muchos inversores, la estabilidad que ofrece Airbus se ha convertido en un atractivo a largo plazo frente a la volatilidad de Boeing. Ken Herbert, analista de la Royal Bank of Canada, resumió el sentir del mercado: “El foco de los inversores se mantiene en la ejecución de entregas de Airbus, lo cual le da una ventaja competitiva sobre Boeing”.
¿Se consolidará Airbus como líder de la industria aeronáutica?
La competencia entre Airbus y Boeing está lejos de concluir, pero las proyecciones favorecen al fabricante europeo en los próximos años. Según analistas de RBC Capital Markets, Airbus podría alcanzar el 60% del mercado de fuselaje estrecho hasta 2026, dejando a Boeing en una posición de desventaja. No obstante, la capacidad de Airbus para capitalizar esta oportunidad dependerá de su habilidad para superar los problemas de suministro, especialmente en cuanto a los motores de sus aviones. Brooke Sutherland, analista del sector, enfatiza que “los clientes que desean un nuevo reactor antes del final de la década podrían verse forzados a recurrir a Boeing si Airbus no logra resolver sus problemas de producción”.
Al respecto, el CEO de Airbus, Guillaume Faury, se mostró optimista en una reciente conferencia de prensa, señalando que “Airbus se encuentra en una posición privilegiada para satisfacer la demanda futura del mercado aeronáutico”. No obstante, reconoció que un competidor como Boeing es fundamental para la industria, ya que “una competencia saludable impulsa a la innovación y la calidad”.
El impacto de la rivalidad Airbus-Boeing en Argentina y el mundo
La histórica rivalidad entre Airbus y Boeing tiene repercusiones que se extienden más allá de Europa y Estados Unidos. En Argentina, donde el sector de la aviación comercial ha enfrentado desafíos financieros y operativos, el equilibrio entre estos dos fabricantes define en gran medida la disponibilidad y los costos de aviones en el mercado. Las aerolíneas nacionales, que suelen optar por modelos de un solo pasillo como el A320 y el 737 para rutas de corto y medio alcance, dependen de un suministro estable y precios competitivos para mantener sus operaciones.
Con Airbus consolidando su posición y Boeing buscando recuperar la confianza perdida, Argentina y otros países de América Latina podrían beneficiarse de un mercado que promueva la eficiencia y la seguridad. Este contexto brinda a las aerolíneas una base sólida para evaluar las mejores opciones para renovar y expandir sus flotas, fortaleciendo así el sector de la aviación en la región.
Airbus vs. Boeing:
- Crisis de confianza en Boeing y el ascenso de Airbus
- La carrera por la entrega de aviones y el reto de las cadenas de suministro
- Defensa y espacio: un sector en dificultades para ambos gigantes
- La volatilidad de Boeing en el mercado bursátil
- ¿Se consolidará Airbus como líder de la industria aeronáutica?
- El impacto de la rivalidad Airbus-Boeing en Argentina y el mundo
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