Buenos Aires (AT) – La Residencia del Embajador de Alemania en la Argentina fue escenario el pasado jueves 26 de junio de una velada cargada de historia, datos y visión de futuro. Con la excusa del bicentenario de la inmigración alemana, se desarrolló la “Noche de Agricultura 2025”, organizada por la Embajada junto con la Fundación Konrad Adenauer (KAS). La actividad reunió a funcionarios, empresarios, expertos y representantes de la comunidad germano-argentina.
Un recorrido de dos siglos
En su discurso de bienvenida, el Embajador Dieter Lamlé marcó el tono del evento: “Hoy no sólo celebramos un hito histórico notable. Celebramos relaciones auténticas”. Destacó el rol central que tuvo el agro como puente entre ambas naciones y subrayó que, desde el siglo XIX, los inmigrantes alemanes dejaron una marca imborrable en el desarrollo productivo argentino.
Lamlé repasó la llegada de los primeros colonos alemanes convocados por Karl Heine en 1825, las primeras colonias agrícolas como Esperanza, San Carlos o Hinojo, y la historia de apellidos clave como Bauer y Kühnlein, pioneros de la industria molinera y del té en Misiones.

Ciencia, innovación y legado
El embajador también puso en valor el aporte científico de figuras como Enrique Klein, responsable del primer criadero privado de semillas del país, y José Buck, considerado el padre del mejoramiento genético de semillas en Argentina. “El 70% del trigo que se sembraba en la década del 50 provenía del criadero de Klein”, recordó.
A su vez, resaltó que la bioeconomía y la innovación son hoy ejes centrales del vínculo bilateral. Citó iniciativas como el proyecto “Diálogo argentino-alemán para innovaciones sustentables en la agricultura” y el programa German Accelerator, que apoya startups del agro en su internacionalización.

El presente: cooperación concreta
Lamlé subrayó que actualmente empresas alemanas como Bayer, BASF, Claas, Helm y Evonik siguen invirtiendo en tecnología y soluciones sustentables. “Nuestra relación no se nutre sólo de recuerdos – sino que es presente y futuro”, afirmó.
La Cámara de Industria y Comercio Argentino-Alemana (AHK) también fue mencionada como actor clave en la articulación entre empresas de ambos países. Y se destacó el rol de muchas familias de origen alemán que siguen activas como productores, aportando divisas y estabilidad al país.

Política, clima y el acuerdo UE-MERCOSUR
El discurso cerró con una mirada geopolítica. Lamlé celebró la conformación del nuevo gobierno alemán, encabezado por el Canciller Friedrich Merz (CDU), que declaró a América Latina –y en particular a la Argentina– como socio estratégico. También defendió el Acuerdo de Asociación UE-MERCOSUR, destacando sus beneficios económicos y ambientales.
“El acuerdo es más necesario que nunca. Compromete a ambas partes a objetivos de sustentabilidad. Y no olvidemos que el productor agropecuario trabaja con, y no contra, la naturaleza”, subrayó. En un tramo inusual, incluso apeló al humor para desactivar críticas: “La carne argentina es inigualable. 200 gramos más per cápita por año en Europa ni siquiera serían un ojo de bife entero”.

Paneles con mirada al futuro
Tras el discurso, se sucedieron dos instancias de debate. Primero, un diálogo sobre innovación en el agro, con la participación de Nicolás Bronzowich (INTA), Jorge Gambale (Secretaría de Agricultura) y Edgard Ramírez (proyecto de cooperación bilateral).
Luego, un panel sobre el impacto del acuerdo UE-MERCOSUR, moderado por Susanne Käss (KAS), con funcionarios nacionales y provinciales, y representantes del sector privado como Gustavo Idígoras (CIARA-CEC) y Ricardo Fernández Pancelli (BASF Argentina).
Un vínculo que se proyecta
Con un enfoque integrador y realista, el evento dejó en claro que la relación entre Alemania y Argentina en el agro va mucho más allá del pasado compartido. Se trata de una alianza activa que apuesta a la sustentabilidad, la innovación y el crecimiento conjunto en un contexto global cada vez más desafiante.
Como expresó Lamlé, “las relaciones entre Alemania y Argentina se nutren desde siempre del intercambio entre las personas”. En un contexto de transformaciones, el sector agrícola sigue siendo un terreno fértil para cultivar la cooperación bilateral.
Con la colaboración de Carolina Iglesias, directora de Relaciones Institucionales del Argentinisches Tageblatt.







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