Buenos Aires / Bruselas (AT) – Las elecciones para el décimo Parlamento Europeo no generaron el temido avance de la derecha a nivel europeo pero si marcan como pocas veces antes la política interna en varios países miembros. Entre ellos, el eje franco-alemán, considerado el corazón de la idea europea. El resultado también refleja el cambio de prioridades de los votantes. “Preservar la paz” fue la principal preocupación para los votantes alemanes, según la última encuesta de Infratest Dimap. En segundo, y tercer lugar, “Seguridad Social” y “Migración ilegal”. Recién en el cuarto lugar aparece el “Clima y Medio Ambiente”. En 2019, este había ocupado el primer lugar.
A nivel nacional, los comicios regionales que arrancaron el jueves, 6 de junio, y terminaron ayer domingo anticipan cambios que se sentirán también en América Latina y el Mercosur. Los principales impactos, según los resultados oficiales.
Francia
El partido de Marine Le Pen, la presidenta del partido de derechas, Rassemblement National, logró un histórico 31,37 %. En cambio, Réveiller l’Europe, el partido del presidente francés Emmanuel Macron sufrió un varapalo que lo dejó con 13,8%, lejos en el segundo lugar. El varapalo electoral motivó a Macrón a disolver la Asamblea Nacional, el parlamento francés, y llamar para el 30 de junio a elecciones nacionales.
Bélgica
El primer ministro Alexander De Croo anunció su dimisión al cierre de la noche del domingo y llamó a elecciones. El partido liberal Open Vid que lidera logró apenas hacerse 5,6% de los votos en las en las elecciones federales en Bélgica contra los ganadores del partido nacionalista flamenco N-VA (17,4%) y el de ultraderecha Vlaams Belang (14,4%). El partido socialista flamenco Vooruit logró con 8,4%, también buenos resultados. Las elecciones federales belgas coincidieron con las elecciones europeas.
Austria
En Austria, el partido de nacionalista y de derechas, Freiheitliche Partei Österreichs (FPÖ), fundado en 1955, logró hacerse con el 25,5% de los votos, sumando un 8,3% contra 2019. La FPÖ se convierte así por primera vez en el partido más votado a nivel nacional. Con un 24,7% los conservadores del partido democristiano de la Österreichische Volkspartei (ÖVP) se ubican en un cercano segundo puesto. Sin embargo, el partido de los democristianos es también la agrupación que sufre el mayor desgaste en comparación con los comicios de hace cinco años: pierden 9,9%. Los socialistas de la SPÖ quedaron terceros con 23,3%, cerca del resultado de 2019 (-0,6%), mientras que Los Verdes, obtienen 10,9% (- 3,6%).
Alemania
La alianza conservadora de la CDU / CSU obtuvo un abultado 30% de los votos y con eso un sólido respaldo también para un segundo mandato de Ursula von der Leyen, al frente del ejecutivo europeo. No obstante, las celebraciones en la sede del Konrad Adenauer Haus en Berlín, que lideró Friedrich Merz como presidente de la CDU, no fueron del todo exultantes. Demasiado pesa el 15,9 % que obtuvo el partido de ultraderecha Alternativa para Alemania (AfD). Si bien el resultado no alcanzó para convertirse en el temido varapalo que anticipaban los sondeos previos a las elecciones, la performance sí confirma que la ultraderecha hoy es la segunda fuerza política en Alemania a nivel nacional, algo impensable hace apenas unos años. El resultado anticipa convertirse en una divisora de aguas para las elecciones generales para el próximo Bundestag, previstas para septiembre 2025. Aún más, considerando que el partido gobernante de la SPD terminó con 13,90 % tercero, empeorando incluso la histórica derrota de 2019, cuando obtuvo 15,8%. Los grandes perdedores de la jornada fueron Los Verdes que apenas pudieron quedarse con 11,9 %, reduciendo su caudal de votos a la mitad, en comparación a 2019. La única buenas noticia para los partidos de coalición gobernante fue para los Liberales de la FDP, con 5,2 % lograron superar los malos augurios de una posible caída debajo de la mínima de 5%.
En resumen, el resultado de las elecciones europeas 2024, configuran un terreno que por sus cambios a nivel nacional particularmente en Francia, promete tener eco fuera de la Unión Europea. Entre otros, en cuanto a las negociaciones reinantes con bloques como el Mercosur.
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