Milei se calza el traje de estadista con su visión sobre Ucrania y el rol de América Latina

Buenos Aires (AT) – No espero mucho. Poco después de su elección, el presidente electo Javier Milei, se animó a jugar en la geopolítica: en una charla con motivo de su victoria en el balotaje, Milei le ofreció al mandatario de Ucrania, Volodímir Zelenski, que Argentina acoja una cumbre de paz con América Latina sobre la guerra que enfrenta al país europeo con Rusia. Diana Mondino, la designada canciller en el gobierno del libertario, lo había informado a través de los medios de comunicación, hace unos días. “Ofrecemos ser la sede si fuera apropiado”, comentó Mondino en su momento. La invitación quedó tapada debajo de los ruidos en torno a la conformación del gabinete del nuevo gobierno. Sin embargo, más allá de una declaración de intenciones típica de una persona que se apresta a tomar funciones ejecutivas, la avanzada tiene todas las características de un cambio de visión a nivel regional.

Una relación compleja en una nueva era

De lograrse, se trataría de la primera iniciativa de este tipo en América Latina. Según informó la Deutsche Welle (DW), el presidente ucraniano agradeció el “apoyo claro” de Milei a su país en el contexto de la invasión militar rusa en un mensaje publicado en la red social X (antes Twitter) e invitó al futuro jefe de Estado argentino a visitar Ucrania una vez asuma la Presidencia, después del 10 de diciembre. “Nada de ambigüedad entre el bien y el mal. Simplemente un apoyo claro a Ucrania. Los ucranianos somos conscientes y lo apreciamos mucho”, dijo Zelenski en su publicación.

La relación entre los países de América Latina y el Gobierno ucraniano ha sido compleja desde el inicio de la guerra. Ucrania invitó en numerosas ocasiones a líderes como el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, a visitar el país, pero de momento no lo ha logrado.

En el caso del Ejecutivo argentino saliente, liderado por Alberto Fernández, los esfuerzos de Zelenski han pasado por la búsqueda de una postura de condena a la agresión rusa más nítida por parte de la Argentina. En ese sentido, es conocida la posición de Milei, que ha tachado al presidente ruso Vladímir Putin de “autócrata”, y que se mostró muy crítico con la política de Fernández con respecto a la guerra de Ucrania. Ya durante la campaña abrió la puerta a una mayor cooperación entre los dos países.

La agenda diplomática bajo un nuevo orden

La transición hacia la nueva ‘era Milei’ ha tenido en la última semana varios tintes marcadamente diplomáticos, que indican un nuevo posicionamiento de la Argentina a nivel internacional. Además de Zelenski, el presidente electo mantuvo conversaciones con el mandatario estadounidense, Joe Biden; el chileno, Gabriel Boric; y la peruana, Dina Boluarte, como también con David Cameron, el flamante ministro de Relaciones Exteriores y antiguo jefe de gobierno británico (2010 – 2016). Como es sabido, el presidente electo argentino invitó al mandatario de Estados Unidos, a su toma de posesión, el 10 de diciembre, pero este declinó por cuestiones de agenda.

Sin embargo, el más claro indicio de que la era Milei podrá marcar un nuevo rumbo diplomático fue su respuesta a un comentario de su antecesor en el cargo, Alberto Fernández. Durante la visita de Milei al actual presidente argentino, en la residencia de Olivos, Fernández le habría sugerido al presidente electo la conveniencia de la cercanía de la Argentina a potencias como China o Brasil. El comentario hace referencia a la invitación que el grupo de los BRICS (Nota d. Red.: Brasil, Rusia, India, China, Sudáfrica) le hizo al país a mediados del años para que la Argentina se integre al grupo a partir de enero 2024. Según lo consignó el columnista Carlos Pagni en el diario La Nación, Milei le habría respondido al mandatario saliente con las siguientes palabras: “Le recuerdo Sr. Presidente que mi gobierno estará alineado con EE.UU. e Israel”.