Buenos Aires (AT) – El año 2023 fue testigo de una continuidad y acentuación de la crisis climática, con eventos extremos en varios partes del mundo. Los incendios forestales han devastado Argentina y Canadá, en tanto que las inundaciones han afectado a India, Camerún y Libia. El calor extremo azotó a Estados Unidos, Europa y Asia, acompañado por un ciclón en Myanmar y una tormenta tropical que impactó a Japón, Guam, Filipinas y Taiwán. En medio de esta serie de desastres, la Conferencia de las Partes número 28, también conocida como COP28, se avecina como un evento crucial que abordará la urgencia de la crisis climática.
La COP28, convocada por la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), se llevará a cabo del 30 de noviembre al 12 de diciembre de 2023 en Dubái, Emiratos Árabes Unidos. Sin embargo, la elección de este lugar generó cierto escepticismo debido a los planes de expansión de petróleo y gas en los Emiratos Árabes Unidos, que contradicen el concepto de emisión neta cero.
Por otro lado, la COP28 se presenta como un evento importante porque marca la primera evaluación de cómo los países cumplen con los compromisos de reducción de emisiones, establecidos en el Acuerdo de París en 2015. Esta evaluación, conocida como “revisión global”, se produce en un momento en que los líderes políticos continúan respaldando la industria de los combustibles fósiles, a pesar de los incendios forestales, el calentamiento del océano y las pérdidas de vidas y medios de vida.
Recordemos que el Acuerdo de París, firmado en 2015, busca limitar el calentamiento global a menos de 2 grados Celsius, preferiblemente a 1.5 grados. Sin embargo, la realidad actual muestra que estamos lejos de cumplir con los recortes de emisiones necesarios para lograr este objetivo.
¿Cómo se desarrollan las COP?
Las COP implican ceremonias de apertura, discursos de líderes mundiales y la presentación de promesas y compromisos. Sin embargo, en el caso de la COP28, las protestas y la indignación se intensificaron, especialmente después de las revelaciones sobre la interferencia de la industria de los combustibles fósiles en los procesos de la conferencia.
En la COP27 se había alcanzado un “pacto histórico”, donde los países desarrollados acordaron proporcionar financiamiento climático para ayudar a naciones más pobres afectadas por desastres climáticos. Aunque se consideró un avance, Alok Sharma, presidente de la COP26, fue crítico al afirmar que el pulso de mantener el calentamiento dentro de los 1.5 grados Celsius sigue en “cuidados intensivos”.
La ciencia no se cansa de enfatizar la urgencia de actuar ya mismo. El cambio climático avanza más rápido de lo que estamos dispuestos a considerar, con más de 3.3-3.6 mil millones de personas vulnerables a los impactos del cambio climático, número que aumentará con el continuo aumento de las temperaturas.
La COP28 se presenta como un momento crucial en el que el mundo debe unirse para enfrentar el desafío climático y cumplir con las necesidades tanto de las personas como de la naturaleza. Si no se aceleran los esfuerzos para alejarnos de los combustibles fósiles y construir economías resistentes al clima, perderemos la oportunidad de limitar el calentamiento a 1.5°C en este siglo, con consecuencias devastadoras.
Hacé tu comentario