lunes, 23 de octubre de 2023

Buenos Aires (AT) – Michael Schnirch (44), llegó a la Argentina en el año 2006, luego de un largo viaje en donde conoció a su mujer oriunda del barrio de Parque Chacabuco. En 2016, junto con André Kai Kalisch, abren el primer local de Extrawurst en el barrio de Constitución. Un restaurante de comida alemana con productos de elaboración propia. En 2018, abren un segundo local de Extrawurst en el barrio de Retiro. En 2021, cierran el local de Constitución. Ante el nuevo escenario que se plantea para 2024, Argentinisches Tageblatt conversó con Schnirch acerca de cómo vive un empresario extranjero la inflación, ese problema tan argentino.

¿Habías vivido en un país con una situación de tan alta inflación antes?

Nunca. Había vivido en Quito, Ecuador, durante un año. Pero cuando llegué al país, ellos hacía rato que ya habían dolarizado su economía (Nota: Ecuador dolarizó su economía en el año 2000, durante la presidencia de Jamil Mahuad). Lógicamente me habían contado como había sido su experiencia inflacionaria y que ella los llevó a la dolarización pero por suerte no la viví.

¿Alguien te había contado lo sucedido con la inflación en la Argentina en los años ochenta y principios de los noventa?

Sí, conozco algunas historias de la hiperinflación pero cuando llegué en 2006 no era un tema que la gente mencionara mucho. No soy experto en el tema

¿Cómo manejan el tema en el restaurant? Sobre todo teniendo en cuenta que la inflación se nota mucho más aún en el rubro alimentos.

Es muy difícil. Hacemos nuestro mayor esfuerzo para no aumentar los precios de nuestros platos de manera constante. Este año, en el primer semestre aumentamos lo menos posible, veníamos haciéndolo cada dos meses. Pero en septiembre debimos realizar dos aumentos de precios de nuestro menú en un mismo mes. No sólo los alimentos aumentan, en la segunda parte del año, lo comenzamos a notar mucho en los servicios como la luz y el gas.

Michael Schnirch, fundador junto con André Kai Kalisch de Extrawurst. (Foto: privada)

¿Cómo ven la situación de los clientes? ¿Ha disminuido la clientela? ¿Notan que los clientes “se cuidan” un poco a la hora de consumir?

La gente sigue consumiendo de la misma manera, no miden sus gastos. Creo que saben que sus pesos pierden valor día a día. Y, como vemos en casi todos los rubros, prefieren consumir antes de que pierdan valor. Nosotros estamos bien, por suerte la clientela sigue siéndonos fiel. Pero lógicamente si cambias pesos por dólares ahí se te caen las lágrimas.

¿Qué sucede con los proveedores? ¿Hay productos que ya no es tan sencillo de conseguir?

Para elaborar nuestras salchichas utilizamos carne de vaca y de cerdo. Lógicamente en un país como la Argentina eso no es problema de conseguir, pero lo que si notamos es una baja notoria de la calidad en ciertos productos importantes para nosotros como son las tripas naturales. Creo que deben dedicar la porción de mejor calidad para la exportación y lo que estamos consiguiendo no es la calidad habitual.

¿Se mantienen optimistas y creen que la inflación podrá comenzar a bajar de a poco?

La verdad es que no lo sé. Me duele decirlo porque me gusta mucho la Argentina, pero no soy optimista. Para las próximas elecciones, si veo los candidatos que tienen más posibilidades de llegar a la presidencia, no me gusta ninguno. Por ejemplo, no me gustó la decisión que tomó Massa de otorgar ese bono para hacer campaña para su candidatura. Nos obligaron a los empleadores a pagar un bono que, en nuestro caso, nos representó en dos meses un millón de pesos. Justo cuando estábamos por aumentar los sueldos. Lamentablemente no soy optimista con el futuro del país, la Argentina necesita un cambio de mentalidad en su gente. Siempre escucho que son los políticos los que hacen mierda el país, pero esos políticos son un espejo de la sociedad, y la sociedad argentina en sí es bastante corrupta y egoísta.

Mini Bio de Michael Schnirch

Nació en Núremberg, Alemania. Tiene un Master en Ciencias Políticas e historia contemporánea de las universidades de Augsburg, Alemania, y Montpellier, Francia. Vivió dos años en Francia y casi un año en Quito, Ecuador, donde desarrolló su tesis y aprendió hablar español. Luego de finalizar sus estudios se dedicó a viajar por el mundo. En 2006, en Valparaíso, Chile, conoció a su esposa argentina y se mudaron juntos a Buenos Aires. Los primeros diez años trabajó para una empresa de software primero en la parte de RR.HH. y luego en la parte de ventas. Fue director de ventas para EMEA. Paralelamente desarrolló junto a su socio, André Kalisch, el proyecto de Extrawurst. La gastronomía siempre fue su pasión. Como estudiante trabajó en varios restaurantes en Múnich, Montpellier y París.

Te puede interesar

Mercedes-Benz mete un rebaje en la carrera hacia la electrificación total

La marca alemana reajusta su estrategia, manteniendo motores de combustión y apostando por ...
3 de julio de 2024

Cómo la inteligencia artificial está cambiando la industria farmacéutica

Matthias Steger, un experimentado químico farmacéutico, combinó su investigación con la ...
2 de julio de 2024

La industria automotriz se prepara para cambiar el mundo

El sector está experimentando una transformación sin precedentes impulsada por la innovación ...
29 de junio de 2024

Volkswagen apuesta por la innovación abierta: US$ 5.000 millones para Rivian

Volkswagen no quiere esperar ni probar más. Tras los problemas para desarrollar su propio software ...
27 de junio de 2024

Hacé tu comentario

Por si acaso, tu email no se mostrará ;)