Buenos Aires (AT) – El pasado sábado se llevó adelante en la ciudad de Buenos Aires el tercer Congreso de Diplomacia Ciudadana organizado en conjunto por la Stiftung Verbundenheit mit den Deutschen im Ausland (Fundación para la solidaridad con los alemanes en el extranjero), la iniciativa #JungesNetzwerk (Red Jóven) y la FAAG (Federación de Asociaciones Argentino-Germanas). A continuación una breve conversación con los principales dirigentes de los organizadores del Congreso:
AT: ¿Qué expectativas tiene respecto a su visita a la Argentina?
Hartmut Koschyk: El Prof. Dr. Oliver Junk y yo, él como Presidente del Fundación. Y yo como Presidente del Consejo de la Fundación, nos ha encantado poder venir personalmente a Buenos Aires en ocasión de la reunión anual de la FAAG. Porque la FAAG es, por supuesto, nuestro socio para las actividades de nuestra fundación en la Argentina. Nuestro proyecto, que lanzamos en 2018, surgió gracias a las gestiones de Thomas Leonhardt y del entonces embajador de Alemania en Argentina, Bernhard Graf von Waldersee, quien me invitó a venir a Argentina en 2014.
Esa fue la primera vez que conocí a la junta directiva de FAAG y desde entonces se ha desarrollado una maravillosa colaboración desde 2018 hasta hoy, también gracias al compromiso de Marco Just Quiles y su equipo y, por lo tanto, estamos felices de ver lo maravillosa que es la cooperación entre FAAG y Stiftung Verbundenheit.
AT: ¿Que función debe cumplir la diplomacia ciudadana en la actualidad de países como la Argentina?
Prof. Dr. Oliver Junk: Estamos viviendo un mundo que era, digamos, inimaginable hace diez años. Hablamos de un mundo con múltiples crisis que están entrelazadas y si alguien cree que los representantes políticos por sí solos pueden ser más eficaces a la hora de hacer frente a estas múltiples crisis, creo que se equivoca. Necesitamos una sociedad civil que se comprenda y se tolere en el mundo.
En otras palabras, necesitamos mucho más trabajo intercultural, y nuestra idea de diplomacia ciudadana es precisamente uno de esos pilares para un trabajo mucho más intercultural, para mucho más entendimiento en el mundo, y lo que Alemania está intentando hacer con la política exterior de cultura y educación. Lo hacemos todos los días de forma voluntaria a través de la diplomacia ciudadana.
AT: Estamos cerca de fin de año. ¿Qué balance hace de la actividad de la fundación para este año?
Hartmut Koschyk: El trabajo comenzó en Argentina. Hoy en día sigue siendo más intenso en Argentina y estamos muy contentos y agradecidos de que la buena cooperación entre nuestra fundación y la FAAG también nos haya permitido ampliar nuestro trabajo y el trabajo de la #JungesNetzwerk más allá de Argentina en varios países vecinos de América Latina, pero Argentina es y sigue siendo el punto de anclaje de nuestro trabajo en la región junto con la FAAG.
AT: ¿Qué espera para el año que viene para el trabajo de la fundación? ¿Qué proyectos tiene la Fundación para el futuro?
Oliver Junk: Bueno, en general, me gustaría que reforzáramos el trabajo, que es un trabajo todavía muy joven aquí y que lográramos, en particular, rejuvenecer las estructuras asociativas y que pudiéramos apoyar el trabajo de las asociaciones, que se ha vuelto más difícil en general, a través de nuestro trabajo aquí en Argentina y creo que estamos en un muy buen camino aquí junto con nuestros socios. En cualquier caso, esto no era de esperar hace cuatro años atrás.
AT: ¿Cómo ve la situación de las comunidades de habla alemana en la región?
Thomas Leonhardt: En Argentina hay una organización como la FAAG que agrupa a todas las instituciones. Y hace las veces de “paraguas”. Todas están bajo su órbita y eso es una gran diferencia entre la comunidad de habla alemana en la Argentina y el resto de la región. En otros países hay muchas asociaciones y muy importantes. Pero no hay una Federación como la FAAG de Argentina.
Eso es muy importante también para el embajador, ya que si hay un problema con alguna institución, el embajador puede recurrir directamente a la FAAG para obtener información y solucionar cualquier situación. Y eso diferencia a la comunidad de habla alemana de la Argentina con las demás en el resto dela región.
AT: ¿Cuándo fue su última visita a la Argentina? ¿Cómo encontró el país a diferencia de aquella última ocasión?
Hartmut Koschyk: La última vez que estuve en Argentina fue en 2019, cuando nuestro proyecto comenzó aquí, así que estoy encantado de ver lo grande que ha sido la colaboración entre FAAG y Stiftung Verbundenheit después de cuatro años. Sobretodo, lo grande que se ha desarrollado la #JungesNetzwerk y lo que es el signo más visible de esta cooperación es que muchos activistas de la #JungesNetzwerk ahora también tienen responsabilidades en las asociaciones alemanas y en la FAAG.
Y ese ha sido siempre nuestro objetivo, que fortalezcamos la FAAG, que modernicemos la FAAG, que rejuvenezcamos la FAAG y que ahora estemos participando en este Congreso de la FAAG en un momento en el que se están tomando otras decisiones importantes para el futuro del trabajo de la FAAG en Argentina. Estamos muy satisfechos por ello.
El profesor Oliver Junk, Marco Just Quiles y yo hemos tenido una muy buena conversación con el nuevo embajador alemán, que está muy interesado en el trabajo de la FAAG. Está muy interesado en el trabajo de la Stiftung Verbundenheit y en la iniciativa #JungesNetzwerk y el hecho de que hayamos podido hablar durante casi dos horas sobre la FAAG y nuestro trabajo como Stiftung Verbundenheit a través del #JungesNetzwerk demuestra que la FAAG es tomada en serio por la embajada alemana y, por lo tanto, también por la República Federal de Alemania como portavoz y también como punto de contacto para las asociaciones alemanas en Argentina. Y eso nos hace muy felices.
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